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Él me llamó Malala. Estreno
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Davis Gugghenheim es un documentalista interesado siempre en temas educativos (Una verdad incómoda, Esperando a Superman). En esta ocasión nos muestra un biópic que habla del antes y el después del ataque que sufrió Malala a los 15 años por parte de los talibanes cuando volvía de la escuela de su pueblo en el valle de Swat (Pakistán). La bala le dejó en estado de coma del que temían que no saldría, afectándole a los movimientos faciales. Su pecado: luchar junto a su padre en favor de la educación de las niñas. El atentado provocó manifestaciones en una gran mayoría de países. La violencia, sin embargo, no logró acallarla ni quitarle la ilusión de seguir luchando sino todo lo contrario, le dio fuerzas renovadas para seguir con sus reivindicaciones. Actualmente, es una ferviente defensora de la escolarización de las jóvenes en todo el mundo.
Ella nos cuenta su historia con toda la frescura y naturalidad propias de su temprana juventud, con su habitual simpatía y dulzura pero al mismo tiempo mostrando contundencia y firmeza cuando tiene que hablar en público o ante la ONU denunciando injusticias.
En la historia de Pakistán, el nombre de Malala alude a un personaje legendario que da su vida por una causa y es un símbolo de coraje y valentía. De ahí que hay quien crea que su padre, activista que defiende el islamismo moderado, ha sido el que ha creado y moldeado a su hija. Son los dos protagonistas los que nos darán sus razones y el espectador el que podrá sacar sus conclusiones. Según la propia Malala: mi padre solo me llamó Malala, no me hizo Malala.
Centrándose en el aquí y ahora, el documental combina bonitas imágenes de animación que aportan recuerdos, con entrevistas, imágenes de archivo, del interior de Pakistán y otras filmadas para la ocasión que nos muestran el lado más íntimo de su familia; su lucha por la educación pero también las inquietudes propias de toda adolescente.
Galardonada a los 17 años con el premio Nobel de la Paz, nos quedaremos con esta bonita frase de la protagonista: un niño, un profesor, un libro y un bolígrafo pueden cambiar el mundo.
Textos: Núria Farré. facebook@cinemaperaestudiants.cat
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